lunes, 8 de agosto de 2011

Nunca sé por dónde va a salir. No sé si va a abrazarme, a emocionarse o a echarme la bronca por dejar que se me caigan los pantalones. La forma en que ella le mira, no puede evitar amarle hasta el último suspiro de su alma aunque discutan como si tuvieran quince años. Porque ahora está todo un poco así, como en la adolescencia. Me encantaría poner una foto suya aquí, pero aunque iluminaría toda la pantalla no le haría justicia. Nunca he visto en ninguna mirada ese brillo...denota vejez y niñez al mismo tiempo, como si pudiera tener lo que quisiera solo con mirar de frente. Hace unos años pasaba los días en la biblioteca y devoraba los libros como si quisiera aprendérselos de memoria, ahora no le hace falta leer para tener su propia fantasia...para evadirse de todo y de todos. El mundo es suyo, y todos dependemos de él. No sé si en el fondo es triste o feliz, no sé si se viene abajo cuando no le vemos. Como hacemos los demás. Pero él aparenta una fuerza que no sé de dónde saca, que nosotros intentamos mostrarle aunque sepa que es tan frágil como el cristal. Todo va a ir bien, vamos a hacerte muy feliz.

miércoles, 3 de agosto de 2011



























Que si no existes yo me muero.