jueves, 31 de marzo de 2011

Se despertó pensando en no haber despertado. En que nadie le llevaba el desayuno a la cama ni compartía sus siestas los fines de semana. Le encantaban los días de té y manta, casi tanto como los de sol y calle. Le gustaba despertarse con las cosquillas en la tripa que le decían que iba a ser un buen día, pero no siempre es como parece. Quería sonreir sin mirar a nadie, quería sonreir(se). Le gusta escuchar la misma canción mil veces, siempre suena distinta...siempre va a removerle algo dentro, se le van a poner los pelos de punta y sin quererlo va a llorar.

Y ahora te hablo de mi, a quien sea que quiera escucharlo. Quiero sentir tu aliento en la nuca cuando me despierte, siempre va a significar que sigues ahí. Necesito sentir que tu mano no va a soltarme, pero que tampoco me asfixia.


Cuando tienes un proyecto en mente, una relación que mantener, un "soñar despierto", una amistad que no puedes dejar que se evapore. Cuando piensas, amas y sientes...tienes que ser tú el que de vida a tus ideas, nadie va a hacerlo por ti. No dejes que el mundo te muerda.

lunes, 14 de marzo de 2011

Esos días que te metes en la cama sabiendo que no vas a dormir...
Se metió debajo de las sábanas cubierta por completo, intentando ahuyentar los monstruos de debajo del armario. Con la necesidad de desahogarse cogió el cuaderno y escribió... todo lo que no podía decir y todo lo que no quería sentir.
Para nada es buen refugio una cama vacía, ni aunque esté plagada de peluches.


domingo, 13 de marzo de 2011

Hay veces que no tengo nada que decir, otras que tengo tantas que simplemente me callo. Me gustaría chillar, hasta reventar cirstales. Me gustaría sentir, sin ver como sangran mis manos. A veces no son las cosas tan fáciles como se pintan, y nadie podría entender lo que otra persona siente por no estar dentro de su cuerpo. Puedo ponerme en vuestro lugar, igual que podeis poneros en el mio.
Me tiré la noche a oscuras mirando el techo, con la música puesta bajito y sabiendo que nadie iba a entrar a darme un abrazo. Y me da miedo sentirme sola siempre. Y me da miedo sentir miedo. Y no sé a quien quiero tener al lado, ni si quiero tenerme a mi misma cuando mi cabeza no me deja sentir.

sábado, 12 de marzo de 2011

Nacemos para morir. Y podemos pasar los años que vivamos sin pena ni gloria, o intentar hacer algo con nuestra vida. La gente necesita aspiraciones, algo en lo que creer...sueños que les gustaría cumplir. Todos necesitamos tener a alguien al llegar a casa, desear que llegue ese día que piensas que cambiará todo. Todos necesitamos que otra persona sea nuestra aspiración, que nos entienda sin ningún pero, que comparta nuestras inquietudes y nos haga reír cuando solo lloramos. Nadie es perfecto, en la misma media en la que nadie es igual a nadie. Son las pequeñas cosas las que nos diferencian...el miedo a las tormentas, las ganas de escribir, de plasmar todo lo que sientes detrás de una lente. Todos deberíamos expresarlo, si se queda dentro solo conseguiremos que se pudra con los años.


viernes, 4 de marzo de 2011

Hablamos del miedo, escribimos sobre lo que nos hace pensar. Pero vivimos de recuerdos, y ellos mismos son lo que atemorizan nuestras noches y hacen que sintamos un nudo en la garganta cuando reconoces esa sensación en el estómago. Si conoces a alguien y decides reservarte, por lo que pueda pasar...por lo que puedas sentir, si decides no ser tú. Si escuchas esa canción que sabes que te hace llorar porque piensas en él. Si miras mil veces las fotografías que tienes guardadas en ese sobre amarillo dentro del último cajón. Si se humedecen tus ojos nada más darte la vuelta después de verle, porque sabes que nunca más seréis lo que fuisteis en su momento. Si los recuerdos se borrasen a los tres segundos no deberíamos tener nada que nos preocupara, pero tú vas a seguir escuchando siempre su canción para poder llorar a solas...¿quién puede vivir sin ellos?