Siempre pensé en como empezaría esto, como me despediría de ti. Ya no estás conmigo, solo me acompañan tus recuerdos. Te he querido tanto...y lo seguiré haciendo hasta que tenga que irme donde ahora estás tú. Fuiste de las primeras personas que me vieron al nacer y yo he sido de las últimas que has visto al morir. Toda una vida, me has alegrado la existencia desde que te vi por primera vez.
Nunca pensé que sentiría lo que siento ahora. Es un dolor físico, parece que se salen las entrañas por la garganta. Te hablo, aunque no estás y por supuesto no me oyes y beso tus fotos y limpio a cada minuto las lágrimas que provocan tus recuerdos.
Donde estés no te preocupes por nada, solo cuídame.
Iré a verte siempre que pueda y aunque esto no te gustaría, te has ido de mi vida pero vas a quedar marcado para siempre en mi piel.
Somos fuertes porque tú nos enseñaste a serlo, y estamos más unidos que nunca porque tú eras el nexo y ahora tenemos que agarrarnos unos a otros para no caernos.
Echo de menos todo, sobre todo tu olor. Hasta en estos últimos meses era el de siempre, eras libertad.
Abuela está bien, llora a escondidas para no hacernos daño y ha decidido quedarse ya sola en la casa porque dice que tiene que afrontar las cosas lo más rápido posible.
Anoche hablábamos de ti, te recordábamos como vamos a hacerlo cada día. Sabemos que te has ido feliz, y que no podíamos hacer más de lo que hemos hecho.
Sé feliz y échame de menos.
viernes, 30 de diciembre de 2011
domingo, 18 de diciembre de 2011
Siempre hemos sido los dos, aunque hubiera más gente. Ahora la casa se llena de gente, de médicos, pero yo siento que seguimos estando los dos solos. Te miro, y se nubla todo lo demás... esté quien esté en la habitación.
Abuela me riñe, y papá... dicen que no te hablo, que me da vergüenza porque siento que hablo sola, pero tú sabes las cosas que te digo cuando estamos los dos solos. Y lloras, te paso la mano por la cara y traspaso tus lágrimas a mis ojos. Si abuelo, lo estoy pasando mal. Nunca le había dado tanta importancia a nada, cuando pasa algo así te das cuenta de lo insignificante que es todo lo demás. Nadie se merece esto, pero tú... menos que nadie.
Hace solamente cinco meses que estábamos en el campo pasando el día, y ahora...seguro que sueñas con todo lo que hemos pasado. Sé que tienes buenos sueños, en las largas hroas que estás en la cama...sé que me quieres como nadie, aunque ya ni siquiera puedas decirmelo.
Abuela es muy fuerte, más de lo que imaginamos. Pero te quiere tanto... daría su vida por ti ahora mismo, sin pensárselo ni siquiera una vez. Te da tres besos por minuto y no te suelta la mano... pienso que nunca lo haría, que se iría contigo si pudiera.
Te vas, lo sé... y no sé como agarrarte, como gritarte que no me dejes sola. Te sigo necesitando como cuando era una niña. Papá me dice que disfrute ahora, que sigues aquí y que no tienes dolores, que no sufres y que yo tengo que ser fuerte para que me veas sonreir siempre.
Sé que cuando no estés sentiré que sigues conmigo cada día, y nunca he creído en nada. Pero creo en ti y no te permitirías nunca dejarme sola.
Abuela me riñe, y papá... dicen que no te hablo, que me da vergüenza porque siento que hablo sola, pero tú sabes las cosas que te digo cuando estamos los dos solos. Y lloras, te paso la mano por la cara y traspaso tus lágrimas a mis ojos. Si abuelo, lo estoy pasando mal. Nunca le había dado tanta importancia a nada, cuando pasa algo así te das cuenta de lo insignificante que es todo lo demás. Nadie se merece esto, pero tú... menos que nadie.
Hace solamente cinco meses que estábamos en el campo pasando el día, y ahora...seguro que sueñas con todo lo que hemos pasado. Sé que tienes buenos sueños, en las largas hroas que estás en la cama...sé que me quieres como nadie, aunque ya ni siquiera puedas decirmelo.
Abuela es muy fuerte, más de lo que imaginamos. Pero te quiere tanto... daría su vida por ti ahora mismo, sin pensárselo ni siquiera una vez. Te da tres besos por minuto y no te suelta la mano... pienso que nunca lo haría, que se iría contigo si pudiera.
Te vas, lo sé... y no sé como agarrarte, como gritarte que no me dejes sola. Te sigo necesitando como cuando era una niña. Papá me dice que disfrute ahora, que sigues aquí y que no tienes dolores, que no sufres y que yo tengo que ser fuerte para que me veas sonreir siempre.
Sé que cuando no estés sentiré que sigues conmigo cada día, y nunca he creído en nada. Pero creo en ti y no te permitirías nunca dejarme sola.
sábado, 19 de noviembre de 2011
Mi padre siempre ha sido grande y fuerte. Y ahora es muy pequeño, muy pequeño y débil. Están cambiando tantas cosas en poco tiempo, no quiero hacerme mayor. No quiero ver muertes y tener que sonreir cuando de verdad no puedo. Llevo tres meses escondiéndome para llorar y tres años sufriendo de cerca una enfermedad que te mina...que quita absolutamente todas tus fuerzas. Somos una familia muy pequeña, y lo seremos aún más. Pero hay que tirar hacia adelante. No deja de repetirme: "Él se irá, cuando sea, pero nosotros nos quedamos". Tengo miedo de que me deje sola, siempre he seguido sus pasos. He sido su niña, y lo sería si tuviera muchísimas más. Él me da fuerzas, por todo lo que ha vivido y por lo que siempre quiere compartir conmigo. Ahora ya no consigue hablarme, pero me mira de una forma que no creo que nadie más pueda mirarme nunca. Me dice tanto sin hablar. No suelta mi mano, quiere vivir. Lo sé, y eso me hace aún más impotente...quiero estar aquí, las 24h. No quiero separarme de su lado, no quiero dejarle ir. Me quedaré con lo bueno, por supuesto. Pero es tan difícil recordar todo lo que pasé con él cuando era niña, viéndole así...no puedes hacerte a la idea, aunque quieras. Son días muy difíciles, y simplemente no ves la salida. Pero no puedo huir.
No puedo explicar lo que sentí ayer, llegué avisada...llevaba una semana sin hablar practicamente. Y llegué, y me agarró la mano...me habló. Y entonces mi padre lo dijo, y sé que lo recordaré toda mi vida: "Alba, no te vayas. Eres su medicina".
No puedo explicar lo que sentí ayer, llegué avisada...llevaba una semana sin hablar practicamente. Y llegué, y me agarró la mano...me habló. Y entonces mi padre lo dijo, y sé que lo recordaré toda mi vida: "Alba, no te vayas. Eres su medicina".
lunes, 24 de octubre de 2011
Se pasa mal, se pasa muy mal. Pero situaciones así te dejas momentos que cuando los estás viviendo sabes que será de lo último que recuerdes siempre. Y ayer lo fue. Al llegar estaban los 4, sentados en la mesa donde de pequeña coloreaba mis cuentos y mirando en una caja enorme. Eran fotos, la mayoría de hace más de sesenta años. Creo que solo había una en color y los matices de los blancos y negros se mezclaban con las lágrimas en los ojos de mi abuela. Me contaron un montón de cosaas, me resumieron muchísimos años de vida. Y sé sin duda que lo recordaré siempre, cuando no estén o cuando alguna enfermedad me haga perder la memoria a corto plazo pero me mantenga intactas las sensaciones de hace años. Cáncer, difícil hablar de ello si no se sabe... y desgraciadamente cada vez más gente y más jóven lo padece. Él ya tiene una edad en la que solamente se espera un final, pero nunca quiso que fuera este. No me gusta su mirada, pero no aparto la mia de él... ha perdido todo, no tiene expresión, no me transmite aquellas cosas que solo él sabe. Pero me encantan sus manos y la sensibilidad que tiene ahora, solamente una caricia supone para él como un abarazo de más de media hora. También me gusta su forma de hablarme, como si no supiera cuando va a volver a hacerlo. Antes yo era "la niña", ahora soy "su niña".
miércoles, 28 de septiembre de 2011
Puedo ser muy pesada a veces, pero siempre me encanta recordarlo. Hace cuatro años, dos meses, veintiocho días, trece horas y cuarenta y tres minutos que me besaste por primera vez. Podemos estar más lejos o más cerca, vernos más o menos pero sentiremos siempre lo mismo. Seremos más o menos crios, seremos siempre muy niños cuando estamos los dos solos. Quiero besos en la frente, andar de la mano, que me des besos sin dejar de caminar, que me hagas cosquillas y me coloques el pelo. Quiero inviernos debajo de mi manta de leopardo, de viajes a Cáceres y esperarte en la estación de Salamanca. Que el punto de unión sea Plasencia, o el fin del mundo. Habrá muchos más regalos, de esos que no son materiales. Tendremos muchos más sueños y todos los planes de futuro se llevarán a cabo. Nos quedan tantos años, tantos malos momentos que pasar, muchos más buenos... Y esperemos poder vivir dentro de no mucho debajo del mismo techo y empezar a formar lo que puede ser una sola vida de dos independientes.
viernes, 16 de septiembre de 2011
Por fin algo sale bien este verano, te tendré a 215km en vez de a 7 horas de bus. Y me alegra, claro que si. Me alegra más que cualquier cosa, de hecho es lo único que ahora lo hace. Ahora solo queda volver a acostumbrarme a no verte las 24 horas del día.
A veces soy insoportable. Tengo otra crisis de identidad, quiero tirar la ropa de mi armario y llenarlo otra vez. Me ha dado por música ochentera, será por mi pelo. Mañana será bicolor, pelo nuevo...misma vida. Quiero un conejo enano, se va a llamar Alien, aunque desistiré de la idea si en un mes no lo tengo. Quiero una polaroid, aunque me deje eso que llaman paga en comprar papel por internet. Y quiero que te pongas bien, aunque eso con dinero no se consiga.
A veces soy insoportable. Tengo otra crisis de identidad, quiero tirar la ropa de mi armario y llenarlo otra vez. Me ha dado por música ochentera, será por mi pelo. Mañana será bicolor, pelo nuevo...misma vida. Quiero un conejo enano, se va a llamar Alien, aunque desistiré de la idea si en un mes no lo tengo. Quiero una polaroid, aunque me deje eso que llaman paga en comprar papel por internet. Y quiero que te pongas bien, aunque eso con dinero no se consiga.
lunes, 8 de agosto de 2011
Nunca sé por dónde va a salir. No sé si va a abrazarme, a emocionarse o a echarme la bronca por dejar que se me caigan los pantalones. La forma en que ella le mira, no puede evitar amarle hasta el último suspiro de su alma aunque discutan como si tuvieran quince años. Porque ahora está todo un poco así, como en la adolescencia. Me encantaría poner una foto suya aquí, pero aunque iluminaría toda la pantalla no le haría justicia. Nunca he visto en ninguna mirada ese brillo...denota vejez y niñez al mismo tiempo, como si pudiera tener lo que quisiera solo con mirar de frente. Hace unos años pasaba los días en la biblioteca y devoraba los libros como si quisiera aprendérselos de memoria, ahora no le hace falta leer para tener su propia fantasia...para evadirse de todo y de todos. El mundo es suyo, y todos dependemos de él. No sé si en el fondo es triste o feliz, no sé si se viene abajo cuando no le vemos. Como hacemos los demás. Pero él aparenta una fuerza que no sé de dónde saca, que nosotros intentamos mostrarle aunque sepa que es tan frágil como el cristal. Todo va a ir bien, vamos a hacerte muy feliz.
miércoles, 3 de agosto de 2011
lunes, 13 de junio de 2011
12062010
Despertar cada día junto a él...
Nunca pensé que iba a pasar tanto tiempo desde que nos conocimos, creo que tampoco lo pensaste tú...quizás que iba a ser una más o que no iba a ir a ninguna parte, pero esto fue un 1 de Junio de 2008 y después de muchas idas y venidas ya si hay algo que celebrar. Me alegro un montón de haber podido pasar el día de ayer contigo, porque pensaba que no iba a ser así. Y ahora mismo no sé ni siquiera que decir porque lo sabes todo.
Nunca pensé que iba a pasar tanto tiempo desde que nos conocimos, creo que tampoco lo pensaste tú...quizás que iba a ser una más o que no iba a ir a ninguna parte, pero esto fue un 1 de Junio de 2008 y después de muchas idas y venidas ya si hay algo que celebrar. Me alegro un montón de haber podido pasar el día de ayer contigo, porque pensaba que no iba a ser así. Y ahora mismo no sé ni siquiera que decir porque lo sabes todo.
jueves, 9 de junio de 2011
domingo, 29 de mayo de 2011
Y cuando pensaba que nada podía hacer mejores los tres días, vuelvo al autobus a seguir con las largas horas de viaje y me encuentro con esto.
Pasar los días, las horas, los minutos, los segundos sin despegarme ni un sólo momento de tu lado.
Infinito, lo que para muchos significa el final de un orden numerico para nuestra vida tiene otro significado, nuestros sentimientos no tienen limites, quiero que lo veas reflejado no solo en mi corazón, marcarlo en mi piel para seguir demostrándote lo que tu eres para mi, “Mo Cuishle”, mi amor, mi sangre, cuando el mundo se te venga encima, te sientas sola, sin nadie que te proteja, acuerdate de mirar tu dedo índice y verás más allá de lo que nadie puede llegar a ver, sólo tu y yo, te protegeré siempre.
Quiero ser tu atrapasueños, sostener el destino de tu futuro, ser tu futuro, ser tu destino.
Y todo se hace más fácil y las lágrimas son de alegria. En diez días me tienes contigo otra vez.
Pasar los días, las horas, los minutos, los segundos sin despegarme ni un sólo momento de tu lado.
Infinito, lo que para muchos significa el final de un orden numerico para nuestra vida tiene otro significado, nuestros sentimientos no tienen limites, quiero que lo veas reflejado no solo en mi corazón, marcarlo en mi piel para seguir demostrándote lo que tu eres para mi, “Mo Cuishle”, mi amor, mi sangre, cuando el mundo se te venga encima, te sientas sola, sin nadie que te proteja, acuerdate de mirar tu dedo índice y verás más allá de lo que nadie puede llegar a ver, sólo tu y yo, te protegeré siempre.
Quiero ser tu atrapasueños, sostener el destino de tu futuro, ser tu futuro, ser tu destino.
Y todo se hace más fácil y las lágrimas son de alegria. En diez días me tienes contigo otra vez.
jueves, 19 de mayo de 2011
Regresaré siempre a ti, volveré siempre a tus brazos para sentirme protegida. Te querré, como te quiero...como lo llevo haciendo 4años y como lo haré toda la vida. Nada podrá separarnos, nada podrá hacernos más fuertes de lo que ya somos. Sentiré la felicidad cuando camines de mi mano. Sé que siempre vas a estar en mis peores momentos, sé que siempre tendrás las palabras justas...que me dirás las cosas que nunca antes me habían dicho solo por verme sonreir. Sé que eres todo lo que necesito y siento que nunca más sentiré lo que siento ahora. Y me abrazas por detrás, me besas el pelo...y de pronto todo lo demás desaparece. Y me acompañas, andando en silencio...cuando sabes que algo va mal pero no soy capaz de contarlo. Y a veces el silencio es la mejor respuesta. Y te quiero, por lo que eres. Y sé que me quieres, por lo que te he hecho ser. Esto es el principio de nuestro futuro, esto es lo que queremos. Y ya nada me parecen barbaridades, ya nada me parece suficiente. Quiero despertarme a tu lado, quiero que me despiertes. Que sientas que no necesitas nada más. Quiero oirte, y que a diario me repitas lo que hay...aunque ya lo sepamos. Ahora mismo si hace falta repetirlo las 24horas del día, los 365 días del año. Quiero llevarlo siempre conmigo, quiero tenerte siempre.
lunes, 16 de mayo de 2011
Sigo quitándome el esmalte de las uñas cuando me pongo nerviosa. Todavía me arropo con la sábana aunque haga mucho calor. Aun se me pone un nudo en la garganta cuando hablo con mi abuelo por teléfono. Sigo siendo ordenada, aunque no en la misma medida. Todavía te echo de menos, las 24 horas del día. Ahora y siempre necesitaré un (tu) abrazo antes de ir a dormir. Aun sigo queriendo a personas a las que echo de menos, me quieran o no a mi. Me sigue gustando la gente diferente, no la que quiere serlo. Me siguen enganchando las peores series del mundo y todavía no puedo dormir sin leer antes.
Hay cosas que no cambian y otras que ahora toman otro significado, como la palabra infinito...como algunas fechas, algunas caras y algunos nombres.
Hay otras cosas que se siguen echando de menos, como tú...como yo, como los dos juntos.
Hay cosas que se siguen queriendo...como los domingos de casa, sofá y manta. Contigo.
Hay cosas que no cambian y otras que ahora toman otro significado, como la palabra infinito...como algunas fechas, algunas caras y algunos nombres.
Hay otras cosas que se siguen echando de menos, como tú...como yo, como los dos juntos.
Hay cosas que se siguen queriendo...como los domingos de casa, sofá y manta. Contigo.
domingo, 15 de mayo de 2011
Recuérdame que soy la única, susurrame que me quieres. Hazme sentir protegida y que sepa lo que es volar sin alas. Dibuja nubes en mi espalda y recorre mi silueta con tus manos. Siente que se te olvida todo cuando estás conmigo y despiértame solo con tu mirada. Enséñame a sonreir y a no llorar cuando no merece la pena. Hazme fuerte, pero sobre todo..quiereme.
martes, 10 de mayo de 2011
Puede que sea porque estamos lejos, o porque te siento cerca. Porque hemos estado juntos casi las venticuatro horas del día hace apenas dos, y parece que ha pasado un mes. Y esto con que lo leas tú me vale, y lo que siento con que lo sepas tú también. Dejamos atrás muchas cosas por sacar adelante el futuro, y sobra decir lo que los dos queremos...porque solamente sirve que lo sepamos nosotros. Y podría decirte mil cosas, pero no quiero hacerlo por aquí...asique me esperaré al día 26.
sábado, 30 de abril de 2011
Vengo de pasar un rato con ellos, el mejor del día. Aunque sea media hora y yo no entienda nada de fútbol, podría pasarme días debatiendo con él...dejando que me cuente lo que piensa y a veces sin ni siquiera hablar. Y me gusta sentarme en el sofá con ella y que me agarre las manos, ver su sabiduria entre los anillos. Las arrugas que la envuelven la hacen ser feliz. Pero hace tiempo que tiene una sonrisa amarga en la cara y que cuando viene a casa se derrumba y llora sin ningún tipo de límite. La admiro, por tener que fingir las venticuatro horas del día...por tener cuidado de que no se borre su sonrisa bajo ningún concepto. Me hace darme cuenta a veces de lo fuertes que pueden llegar a ser las personas si se lo proponen. Él siempre ha sido mi debilidad y tengo mis días y mis noches...porque me doy cuenta de lo que le echaré de menos cuando me falte. Llevo escuchando decir a mi padre más de un año que no podemos permitir que se nos pare la vida, pero a veces incluso me pregunto cómo la gente puede vivir como si nada...con lo mal que estamos nosotros. Él no ha vuelto a ser el mismo, como ninguno de nosotros y no creo que podamos volver a serlo. Simplemente se aprende a vivir con las cosas, pero la mayoría no se superan.
martes, 26 de abril de 2011
lunes, 18 de abril de 2011
Tengo una sensación extraña en el estómago. Y no voy a hablar en tercera persona ni contar historias de esas que no le pasan a nadie. Hablo de mi. De que te echo de menos y que me puede la impotencia de no saber qué estás haciendo. No me gusta depender de nadie, aunque ir constantemente a mi rollo también me está dando problemas. Y me gustaría que estuvieras aquí, para contarte como me siento...para pasar las horas muertas hablandote de mi vida en un banco mientras tú, solamente me miras. Y esa mirada entre otras muchas cosas es la que me hace quererte, y puede que nadie lo entienda...pero ya no quiero tener que darle explicaciones a nadie.

Y si tengo que buscar un motivo por el que no me guste el verano...los bombones de la nevera saben mucho peor. Hay cosas que simplemente, no hay que enfriar.
Y si tengo que buscar un motivo por el que no me guste el verano...los bombones de la nevera saben mucho peor. Hay cosas que simplemente, no hay que enfriar.
jueves, 31 de marzo de 2011
Se despertó pensando en no haber despertado. En que nadie le llevaba el desayuno a la cama ni compartía sus siestas los fines de semana. Le encantaban los días de té y manta, casi tanto como los de sol y calle. Le gustaba despertarse con las cosquillas en la tripa que le decían que iba a ser un buen día, pero no siempre es como parece. Quería sonreir sin mirar a nadie, quería sonreir(se). Le gusta escuchar la misma canción mil veces, siempre suena distinta...siempre va a removerle algo dentro, se le van a poner los pelos de punta y sin quererlo va a llorar.
Y ahora te hablo de mi, a quien sea que quiera escucharlo. Quiero sentir tu aliento en la nuca cuando me despierte, siempre va a significar que sigues ahí. Necesito sentir que tu mano no va a soltarme, pero que tampoco me asfixia.
Y ahora te hablo de mi, a quien sea que quiera escucharlo. Quiero sentir tu aliento en la nuca cuando me despierte, siempre va a significar que sigues ahí. Necesito sentir que tu mano no va a soltarme, pero que tampoco me asfixia.
lunes, 14 de marzo de 2011
Esos días que te metes en la cama sabiendo que no vas a dormir...
Se metió debajo de las sábanas cubierta por completo, intentando ahuyentar los monstruos de debajo del armario. Con la necesidad de desahogarse cogió el cuaderno y escribió... todo lo que no podía decir y todo lo que no quería sentir.
Para nada es buen refugio una cama vacía, ni aunque esté plagada de peluches.
Se metió debajo de las sábanas cubierta por completo, intentando ahuyentar los monstruos de debajo del armario. Con la necesidad de desahogarse cogió el cuaderno y escribió... todo lo que no podía decir y todo lo que no quería sentir.
Para nada es buen refugio una cama vacía, ni aunque esté plagada de peluches.
domingo, 13 de marzo de 2011
Hay veces que no tengo nada que decir, otras que tengo tantas que simplemente me callo. Me gustaría chillar, hasta reventar cirstales. Me gustaría sentir, sin ver como sangran mis manos. A veces no son las cosas tan fáciles como se pintan, y nadie podría entender lo que otra persona siente por no estar dentro de su cuerpo. Puedo ponerme en vuestro lugar, igual que podeis poneros en el mio.
Me tiré la noche a oscuras mirando el techo, con la música puesta bajito y sabiendo que nadie iba a entrar a darme un abrazo. Y me da miedo sentirme sola siempre. Y me da miedo sentir miedo. Y no sé a quien quiero tener al lado, ni si quiero tenerme a mi misma cuando mi cabeza no me deja sentir.
Me tiré la noche a oscuras mirando el techo, con la música puesta bajito y sabiendo que nadie iba a entrar a darme un abrazo. Y me da miedo sentirme sola siempre. Y me da miedo sentir miedo. Y no sé a quien quiero tener al lado, ni si quiero tenerme a mi misma cuando mi cabeza no me deja sentir.
sábado, 12 de marzo de 2011
Nacemos para morir. Y podemos pasar los años que vivamos sin pena ni gloria, o intentar hacer algo con nuestra vida. La gente necesita aspiraciones, algo en lo que creer...sueños que les gustaría cumplir. Todos necesitamos tener a alguien al llegar a casa, desear que llegue ese día que piensas que cambiará todo. Todos necesitamos que otra persona sea nuestra aspiración, que nos entienda sin ningún pero, que comparta nuestras inquietudes y nos haga reír cuando solo lloramos. Nadie es perfecto, en la misma media en la que nadie es igual a nadie. Son las pequeñas cosas las que nos diferencian...el miedo a las tormentas, las ganas de escribir, de plasmar todo lo que sientes detrás de una lente. Todos deberíamos expresarlo, si se queda dentro solo conseguiremos que se pudra con los años.
viernes, 4 de marzo de 2011
Hablamos del miedo, escribimos sobre lo que nos hace pensar. Pero vivimos de recuerdos, y ellos mismos son lo que atemorizan nuestras noches y hacen que sintamos un nudo en la garganta cuando reconoces esa sensación en el estómago. Si conoces a alguien y decides reservarte, por lo que pueda pasar...por lo que puedas sentir, si decides no ser tú. Si escuchas esa canción que sabes que te hace llorar porque piensas en él. Si miras mil veces las fotografías que tienes guardadas en ese sobre amarillo dentro del último cajón. Si se humedecen tus ojos nada más darte la vuelta después de verle, porque sabes que nunca más seréis lo que fuisteis en su momento. Si los recuerdos se borrasen a los tres segundos no deberíamos tener nada que nos preocupara, pero tú vas a seguir escuchando siempre su canción para poder llorar a solas...¿quién puede vivir sin ellos?
lunes, 21 de febrero de 2011

Me gusta cuando está lloviendo y lo ves desde la ventana; dos personas agarradas como si fuesen una sola, que se esconden tanto debajo de su paraguas como de su sonrisa. También los días que te despiertas y sientes que va a ir todo bien, que el jersey sigue oliendo al suavizante de tu madre y te hace volver a casa por dos segundos. Las tardes que no tienes nada que hacer, y simplemente sientes. Me alegra el día cuando enciendo la cámara y encuentro fotos que tenía olvidadas, tanto como cuando se me ocurre algo y al instante tengo que escribirlo. Me refugio detrás del objetivo, porque sé que expresa mil veces mejor que yo lo que siento. Me gustan las tardes en el campo y echarme en el césped sin mirar a ninguna parte; me recuerdan a cuando tenía ocho años y pasaba los tres meses de verano con ellos. Me gustan los abrigos gordos y las chaquetas de lana que pueden abrigar hasta el corazón. Me gustan las fotos antiguas, los libros de segunda mano y todo lo que tenga una historia detrás, todo lo que haya pasado por más cabezas pensantes.
Me gustas tú, más de lo que puede gustarme cualquier otra cosa.
martes, 1 de febrero de 2011
Le echo de menos...y le quiero quizá como el primer día. No ha sido un camino de rosas, ni creo que lo sea en el tiempo que estemos juntos. Pero lo que si pienso es que los problemas, o rompen del todo las situaciones o hacen los lazos más fuertes. Todos hacemos las cosas mal y aceptamos lo que nos viene por ello. Espero de verdad que todo vaya tan bien como todos estos meses, que ya son bastantes para todo lo que hemos vivido...nos merecemos que algo nos vaya bien y aunque tengo el mismo miedo de siempre a estamparme contra el suelo en un momento en el que no sepa levantarme, arriesgo como siempre por cosas que creo que merecen la pena. Contigo puedo comportarme como no lo hago con casi nadie...con mis miedos, mis verguenzas, lo que me gusta y lo que no. Y quiero que me sigas conociendo, más aún si se puede.
martes, 25 de enero de 2011
lunes, 17 de enero de 2011
viernes, 7 de enero de 2011
miércoles, 5 de enero de 2011
Sé que no vas a leer esto, pero aún así necesito desahogarme en algún sitio. Me gustaría chillar y estallar en alguna parte, pero no puedo hacerlo y, como siempre, necesito tener la cabeza fria para tomar las decisiones adecuadas. Si supiera qué es lo correcto sería bien fácil, pero sé que me voy a arrepentir haga lo que haga. Te quiero, claro que lo hago...pero no puedo decirte en más ocasiones que eso no es suficiente la mayoría de las veces. Quizá mi decisión vaya a ser egoísta, pero tenemos que hablar largo y tendido. Te echo de menos, aunque sigamos los dos aquí y creo que te voy a seguir echando de menos durante mucho tiempo. Estemos donde estemos.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)
